domingo, 19 de julio de 2015

Repetición

No sabría decirlo con palabras.
Me cuesta enfocar lo que tendría que ser correcto en este momento para describir el suceso, pero, se hace complejo.
El pasado se remite a una vivencia que ya no existe en el presente, pero que de alguna forma se replica de manera insólita. ¿Como cerrar una puerta inexistente? Los sentimientos se vuelven más coherentes con el pasar de los años. Más certeros e intuitivos. Casi como un radar que permite entender que algunas cosas no son para uno, y que uno sólo puede limitarse a hacer lo que uno sabe hacer y quedarse ahí... En el límite, entre la cordura emocional y el caos que precede al perder el control. Una hojarasca que permite protegerse de alguna manera de situaciones ya vividas. ¿Existe en la vida algo nuevo? ¿O simplemente vamos por ahí repitiendo la historia que nos toca vivir queramos o no? Se pierden momentos y se gana conocimiento, pero quisiera ganar más momentos, a cada paso.

lunes, 13 de julio de 2015

Confianza

Confianza.
  
"Esperanza firme que una persona tiene en que algo suceda, sea o funcione de una forma determinada, o en que otra persona actúe como ella desea"
Una palabra rebuscada, para un concepto rebuscado.
Complejo es cuando uno deposita confianza, sobre todo por la cantidad de expectativas que depositamos en el otro.

Una operación delicada, pues significa abrirse sin ataduras y liberar lo que somos realmente. Es liberarse del disfraz que hemos construido durante nuestra vida. El vestido con el que nos hemos dedicado a proteger al ser sensible que habita en nosotros. Y es en este simple comportamiento, que quedamos expuestos, a todo lo que el mundo oculta. Cuando nos liberamos, el mundo también se libera sobre nosotros.

Hay quizas una trampa en eso. Pero tambien la llave de la liberación.

Por sobre todo, ofrecer confianza, es un sano ejercicio. Casi una manera de poder purgar nuestro exterior. Nos obliga  a estar alerta, a mantenernos constamente en movimiento. Sin caer en el absurdo ejercicio de pensar en el daño que nos puede producir una situacion o alguien en determinado, nos sirve para conocernos a nosotros mismos y por sobre todo, conocer a los demás.

¿Has pensado el por qué siempre te toca relacionarte con personas que en determinado momento, terminan volviendose tus enemigos?

¿O quizas has sentido que todo el amor que pudiste sentir en algún momento, se tranforma en odio, al sentirte traicionado?

Solo expectativas jugandose en el tablero de la vida. Confiar es actuar sobre el mundo y dejar que este se exprese en su totalidad, sin importar el resultado. Uno debe confiar para poder obtener las respuestas que necesita. Sin miedo al futuro o como se desarrollen las cosas. Eso ya no depende de nosotros. Solo depende de nosotros mismos. La confianza es uno de los unicos sentimientos realmente valiosos en el mundo. Nos hace estar en movimiento constante, y nos permite medir con uqien nos relacionamos.

miércoles, 8 de julio de 2015

Mutacion

Todo esta en constante transformación. Algo inevitable. Un principio universal. No pregunta, no avisa, es algo que simplemente ocurre.
  
Asi como lo describe el I Ching, el mitico libro de las mutaciones de origen chino, todo esta constantemente cambiando, invisible, incluso nuestros propios ojos, estan cambiando la forma en que pueden percibir las cosas. Nuestros sentimientos, nuestra forma de ver la vida, como crecemos, como envejecemos. El cambio finalmente es la unica realidad existente.

Aplicar este concepto a las personas, es algo complejo. Existe siempre un principio de apego que pretende evitar este proceso como sea. Una condicion humana innata, que quiere por sobre todas las cosas aferrarse a lo material y aplicar a la personas el concepto de "para toda la vida". Lo anterior desprecia los invisibles cambios que estan ocurriendo en todo momento: Nos casamos, generamos compromisos, hacemos promesas, como si quisieramos demostrarar que tenemos algun poder por sobre las fuerzas cosmicas que rigen nuestras vidas. Lo anterior se transforma en una suerte de quimera, que produce dolor, al pretender negar los cambios, que aconteceran si o si.

Las personas, ingresan a diferentes etapas en sus vidas; niñez, adolescencia, adultez, vejez. Algunas son más conscientes de estos cambios, otras menos. Pero todas deben enfrentarlas llegado al momento. Nadie es inmune a la realidad.

Oculto en la trampa del "creer", todos en algun momento de nuestras vidas, quisimos que un momento o una situacion determinada se prolongara en el tiempo, pero en realidad esa trampa, fue la que nos ocasiono todo el sufrimiento del que muchas veces quedamos prisioneros por largo tiempo. QUizas con la idea de evitar el dolor, cuando lo experimentamos, la sensación primigenia, fue retener ese sentimiento, como una alarma para nuestros sentidos. Sin embargo, revivir el dolor una y otra vez, encierra sufrimiento innecesario. Cada momento vivido es un regalo valioso, y contiene en él, algo que nos hace crecer y que genera en nosotros una lección importante. Es parte de vivir el estar en constante movimiento. Toda cosa que se atasca en determinado punto, esta obligada a sufrir los embates del cambio, le guste o no. Cuando un cambio se viene sobre nosotros, nuestro inconsciente tratara de obrar como un escollo que se resistirá una y otra vez a lo inevitable. Es encesario entonces, entender que todo cambio es para mejor, y nunca para peor, aunque asi lo parezca en primera instancia.

martes, 23 de junio de 2015

Observar la Sombra



Hábilmente, te haces del control como costumbre. Y ahí aparece nuevamente el niño herido de mi infancia. Asustado, temeroso. Nunca amado. Siempre un objeto, un siervo, un amante, pero nunca un ser completo. Aquel que pensaba que la vida sería de una forma completamente a la que le tocó vivir. Lo alzas entre tus brazos y le prometes redención. Lo seduces y sumerges dentro de tus tinieblas, que no son otra cosa que tus dominios, en donde el dolor se hace necesario para vivir. En el borde de la vida y la muerte, pero en verdad, lo que tú quieres inconscientemente es la muerte, aunque ello implique que tú mismo desaparezcas.

Durante tanto tiempo, me refugie en tu regazo, pensando que aquel festín de lágrimas sin derramar, de odio y recelo, serian una armadura lo suficientemente poderosa para enfrentar al mundo; para poder interactuar con la gente y sentirme seguro. Pero era imposible anticiparse al ardid que habías planificado tan sabiamente.  Sabías que si me dejabas preso del dolor, tu presencia se haría más fuerte, y tomarías el absoluto control de todo. Y te dejé. Te dejé que hicieras las cosas a tu manera. Y me volví un ser despreciable, y vicioso. Alejado totalmente de la virtud. Dejé que sabotearas cada uno de los esfuerzos que hice en mi vida, para dejarme siempre en cero, y gruñendo como un animal herido. 

Eso es lo que yo te permití hacer. 

No te culpo por existir. Eres parte de mí, pero no sabía de tu existencia. Creí siempre que los problemas emocionales venían del exterior, y jamás del interior. Pensaba que eras un mito, una leyenda urbana. Una canción perdida en el tiempo. Fue así como empecé a observarte, oculto en las mismas sobras que tejiste a mí alrededor tanto tiempo. Y un día te embosqué, y me di cuenta donde había estado tanto tiempo. Envuelto en una vida que no quería, en donde no era más que un actor interpretando un guion que no estaba claro. Relacionado con gente dañina, gente que no quería sanar y que alimentaban tu presencia. Ya te descubrí y no caigo en tus trampas. Y sé que hoy no te queda más que disfrazarte de rencor angustia y violencia, pero es lo único que te queda para seguir reinando un lugar que ya no te pertenece.

viernes, 19 de junio de 2015

Soberbia

De pronto, aquel idilio, se ve interrumpido por un suceso inexplicable, pero totalmente esperable en nuestra naturaleza. Cada uno refugiado en un inexplicable estado, en donde las palabras y la comunicación carecen totalmente de sentido. Es una situación incomoda y carente de toda logica, que con el paso del tiempo, se va transformando en un cumulo de sensaciones que pueden variar desde el odio más potente, hasta el sufrimiento más profundo.

 ¿Te has sentido preso de un estado de soberbia?

¿Aquel sentimiento de superioridad frente a los demás que provoca un trato distante o despreciativo hacia ellos? 

¿O eres de los que toma la soberbia como un falso sentido del orgullo, o algo que a final de cuentas te completa como ser humano?

 ¿O piensas al igual que Nietzche, que es un valor más en la cadena de valores del hombre?

Es complejo hablar de este concepto en particular. Su percepcion debe variar en cada persona y sin duda para algunos debe ser uno de los puntos principales para permanecer inmutables a las diferentes situaciones que enfrentan durante el transcurso de la vida. 

Por ejemplo, en medio de una discusión, el punto central que generó el conflicto, queda relegado a un segundo lugar, cuando dos "soberbias" se reconocen. Cuando existen dos puntos que quieren permanecer integros y demostrar quien es mas poderoso. La soberbia no transa ni es capaz de reconocer un error. Insiste constantemente en el ejercicio de doblegar a quien se le ponga enfrente, incluyendo al propio ser que le permite su existencia. No hay limites. Hay que arder tratando de demostrar que la razon del ser debe imponerse por sobre el momento, sobre el otro y ganar una victoria que no lleva a ningun lado.


viernes, 12 de junio de 2015

Abismo

Podría tenerlo todo en este momento, en que tranquilamente acaricio tu pelo, y me sumerjo constantemente en tu boca. Pero hay algo en esto. Algo que no podría interpretar con palabras, pues nunca lo había sentido antes. Es como si en verdad, todo esto que hago, lo hiciera solo. Es como si no estuvieras acá. ¿No es extraño? No me hace sentido que me digas que me quieres, y que a veces timidamente me digas que me amas. No me hace sentido que mientras trato de alcanzar tu corazón con la mirada, tus ojos digan otra cosa. Que te enrosques en una caparazón, recubierta por las más hermosas señales, pero que dentro oculte algo. No lo entiendo a decir verdad. Hoy nuevamente me quedo estupefacto, mientras lloras a un costado mio. Intento abrazarte, pero hay un sudor frio e incomodo en tu cuerpo, que traspasa tu ropa. Hay algo en ese gemido, ahi esta la verdad, lo se, pero se me hace imposible llegar a ella. En este momento, esta expuesta la verdadera persona que eres, pero no se que hacer para retenerla. Es aqui donde deberiamos habernos conocido, es en este preciso instante. Pero ya es tarde. Nuevamente y bajo la excusa de un abrazo, tratas de arrimarte sofocada a mi cuerpo inquieto y sediento de tus caricias. Ahi se acaba todo de nuevo. Pienso, y le doy miles de vueltas, tratando de entender que es lo que hay en el fondo de esas lágrimas, de ese pesar. Que hay detras de esa sonrisa que enseñas al mundo, pero esos ojos que encierran tanto dolor, como si les hubieran arrebatado algo. Como si te hubieras acercado demasiado al abismo y el abismo haya penetrado para siempre en ti.

miércoles, 3 de junio de 2015

Calendario



No le avisaron, ni le advirtieron.¿O quizás si, y no hizo caso? Da igual.
No va al caso en este momento.
Simplemente llegó el día en que todo pasó llegó sin mayor aviso. Aunque “ya lo tenía claro”, o al menos eso le hicieron ver.

Era curioso, porque toda su vida supo lo que iba a tener que vivir; lo había visto en libros, en películas, había escuchado en el boca a boca. Habían tratados ancestrales, sicologos, filosofos, monjes, y quizas miles de personajes que podrían haberle dado una lección de vida al respecto. Pero incluso asi, nada podría haberse anticipado al suceso que iba a pasar.
Pero nada de eso sirvió. Y cuando llegó el momento, ninguna de las enseñanzas o consejos que permanecían en su cabeza, se hicieron presente. Simplemente todo ocurrió. Inevitable, doloroso, liberador, con un costo enorme. Haber pretendido hacer cosas que no debía. Haber perdonado lo que no debía perdonar. Haber cargado por tanto tiempo con la culpa. ¿Culpa de qué?

Se refugió en los recuerdos, pero todos ellos estaban contaminados por la obscuridad actual, que no era otra cosa que el reflejo de su propia sombra, proyectada en su futuro.

¿Qué si había sido un error? No. No lo era. Entendió al poco tiempo que era una etapa que había que vivir, que había que sentir, y que por sobre todo, había que aprender de ella. Un aprendizaje que sería arduo, lento, pero era la única manera. No había un punto intermedio para el dolor. O era real o no. Y este, era más real que todos lo que había sentido antes. Era real porque le pegaba justo en donde le dolía: En sus ilusiones.  Aquellos pensamientos de que todo podía ser mejor si se esforzaba y trataba de dar lo mejor.

¡Qué error más grande haber crecido con esa forma de pensar!

¡Qué manera de perder el tiempo, tratando de cambiar las cosas que simplemente debían ser!

Paso el tiempo por cierto. Hoy solo se limitó a escribir lo que significaba ese suceso, y todo lo que aprendió hasta el día de hoy. No hay resentimientos, ni siquiera hay algo para detenerse a escuchar. Cuando mira hacia atras solo hay indiferencia, quizas algo de rencor, y rabia, pero sentimientos que nunca entendió el porque fueron depositados en su corazón.

Un día más por supuesto, que le llena de vida, cuando mira hacia atrás.