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miércoles, 30 de diciembre de 2015

Fin de Año

Finalmente, al caer la noche, una misericordiosa señal de la naturaleza se hizo presente. Una refrescante pausa, después de un día en donde los termómetros mantuvieron el mercurio danzante en un frenesí infernal. Caminamos un rato por aquella calle del centro que parecía en algunos momentos sacada de una película europea. Había poca gente en el centro de la ciudad. Casi todos esperaban medianoche. Nosotros, solo que no pasara algún carabinero, para poder beber algunas cervezas, escondidos entre las estatuas feroces.

- Estaba pensando, o sea, quiero decir, dejando que los pensamientos se "apoderaran" de mi cabeza por un momento, y me di cuenta que la palabra "fin" no tiene sentido.

- Explicame. No entiendo tu poesía nocturna. ¿Acaso el lugar te afecto de alguna forma?

- No. No es el lugar. Solo pensaba un momento en la persona que era hace un año atrás. En aquel momento, el futuro y la soledad me atormentaban como dos entidades insoportables, mientras se iban acabando muchas cosas. Algunas por decisión propia, y otras por causas fuera de mi alcance. Había asimilado que todo lo que tenia que ver con "final", estaba impregnado de alguna forma con la muerte. Y ese sentimiento, estaba devorandose todos y cada uno de mis sueños y esperanzas. Era algo aterrador, ver como todos los días, existía una batalla para despertar y hacerse el animo de seguir adelante. Seguir con la vida, como si nada hubiera pasado. Todo se había vuelto una carga demasiado pesada. No quería empezar nada, porque todo irremediablemente tendría que acabar y no estaba dispuesto a soportar nuevamente la quimera de la despedida, o el rencor de la separación.


- Bueno, pero hoy por lo que veo, las cosas son totalmente diferentes en ti. Te veo como alguien mas decidido a realizar las cosas. A emprender aventuras mucho más grandes que las que alguna vez pudiste imaginar. Mas responsable de si mismo. No voy a decir que más maduro, porque se que esa palabra no te gusta. Entonces, ¿Fue tan malo ese periodo de "finales" del cual me hablas?

- Eso es lo que te quería comentar. Para mi la palabra fin, hoy en día perdió el sentido. Las cosas siguen su marcha, y por más esfuerzos que hagamos por tratar de mantener las cosas inmutables, es algo imposible. Uno debiera enamorarse entonces del cambio, y no así de la perpetuidad de las cosas. Como el delicado pétalo del cerezo que se deja caer. La hermosura de su caída, dura apenas unos segundos, pero aquel momento es sublime y mágico. Es un instante que se perpetua en la memoria y no se borra. En cambio tratar de mantener algo inmutable, es un engaño. Todo cambia, la belleza, el amor, los sentimientos, la vida, la muerte, la consciencia, todo permanece en movimiento. Un movimiento mágico.
¿Cómo es posible que a veces nos aferremos con tanta fuerza a los sentimientos negativos?

- Tienes razón. La palabra fin perdió el significado para mi también hace algún tiempo. Aunque, ahora se acerca el fin de año, y bueno, tu sabes que pasa. ¿Qué hay de eso?

- Creo que a final de cuentas, este "fin de año" es algo importante. Porque es un aviso de que nuestra vida sigue avanzando en el tiempo, y debemos aprovecharla al máximo. Nunca sabemos que es lo que va a pasar en algún momento, si estaremos aquí el próximo año, o no. El mismo pensamiento debiera pasar por la cabeza de todos al momento de darse un abrazo de año nuevo. La persona que abrazas puede que ya no este nunca mas. ¿Por que no desearle sinceramente lo mejor?

- ¿Y que hay de la gente que te hizo daño? 

- Tu ciclo con ellos ya termino. No hay nada que les debas, ni ellos a ti. Ni hay razón para permanecer estancados en rencillas inútiles. Ahí tienes una aclaración de lo que pienso del "fin". Ellos terminaron de ser personas especiales para ti. Ahora son gente normal. Ya no hay un vinculo que necesites con ellos. Y que todo haya cambiado entre nosotros, implica que de alguna forma, tuvimos que crecer para alejarnos. Y cuando crecimos, ya no cabíamos en el mismo espacio. 

Se quedaron mirando un rato la calle, mientras la noche termino de caer en la ciudad. Como un recuerdo lejano, imagenes de gente que ya no estaba, vinieron a mi mente. En algún momento, toda la gente que "me hizo daño" , formó parte de mi. Pero ya no estaban más. Ya formaban parte de otra historia, de otro momento que nunca más iba a volver a ser lo mismo. Ya era algo diferente en mi cabeza, y en la realidad.



- Ya es medianoche. Feliz año nuevo.
- Dame un abrazo. ¡Feliz año nuevo!
- ¡Felicidades!

- FIN-

Muchas gracias a todos los lectores que durante 2015, pudieron revisar mis desvarios en este y mis otros blogs. Espero que tengan un muy feliz año nuevo y que lo mejor del pasado, sea lo peor del futuro.

viernes, 6 de febrero de 2015

La entrevista # 1



-          ¿Y qué es lo que opina entonces respecto a este tema?

-          Pues que no hay receta en definitiva. Podríamos pensar que si existiera algún tipo de solución para los problemas que radican en el enamoramiento, las emociones, noviazgos, consortes, concubinatos, y otras relaciones similares, las antiguas civilizaciones ya lo hubieran descubierto hace milenios, pero no ha sido así.


-          Entonces,  ¿piensa que ante un quiebre  la culpa siempre es del otro?

-          No en absoluto . ¿Me habla de la culpa? ¿Existirá un sentimiento más absurdo que la culpa en este tema? La convivencia tiene mecánicas que no funcionan, por una condición natural de las personas. Recuerde que ante todo lo que digan los científicos y defensores de la conciencia, seguimos siendo animales, y funcionamos de manera territorial, aunque aquellos territorios se hayan trasladado a nuestros pensamientos y sentimientos. Es totalmente descabellado pensar que la otra persona nació para cumplir las expectativas del otro -  que es el sentimiento que predomina hoy cuando estamos bajo los efectos del enamoramiento- por lo que, hay que aclarar que si bien el enamoramiento es una emoción sumamente poderosa y nubla la visión respecto a la persona que tenemos en frente, es una emoción pasajera. Es por eso que cuando surgen los problemas en las relaciones, rápidamente las personas proceden a proyectar en el otro, todos sus problemas internos: Si proyectas silencio, no encuentras la manera de comunicarte, si expresas odio, es simplemente el odio que te tienes tú mismo; si tratas constantemente al otro de mentiroso, es muy probable que estés cubriendo tus propias mentiras  con los actos de tu pareja. Cuando se llega a ese punto, existen dos opciones súper claras: O trabajas arduamente en conjunto para que las cosas funcionen, o te retiras.  No hay otra opción posible. 


-          ¿Es decir que cuando dos personas no logran solucionar el problema en conjunto, no existe salvación?

-          Eso es una realidad absoluta. Si al problema le ponemos paños fríos, aminorando los síntomas pero no la causa raíz, y no se logra un acuerdo real, o se definen bien las metas que la pareja desea – lo que dicho sea de paso, es un triunfo de la comunicación- es absolutamente imposible poder superar esto en el futuro inmediato. Los conflictos de pareja, siempre son de dos, ya sea por omisión o por acción.  Si dos humanos han decidido terminar en convivencia, es una torpeza pensar que el “amor” será el bálsamo milagroso para los problemas. Somos personas, con defectos y virtudes, no personajes destinados a la perfección absurda a la que nos tienen acostumbrados los cuentos de hadas y manuales de convivencia.


-          ¿Y qué pasa cuando las personas se mantienen aferradas a estos círculos interminables de amor y odio?

-          Es lógico pensar que alguna de las partes tiene la culpa de esto. Sin embargo, yo desde mi perspectiva personal, pienso que eso es un error. Estos ciclos no son más que claras señales de que los problemas de convivencia no son producto de “haber formado una pareja”, sino más bien, son las manifestaciones de los problemas que acarrea cada uno. Ya sean celos, inestabilidad emocional, ciclos sentimentales no cerrados, y un largo etcétera. Aparecen durante el desarrollo de la relación como temas pendientes, que nos dan la señal de alerta. Si hablábamos de amor, pues ese es el momento en que hay que generar los acuerdos reales. Sentarse a conversar y asumir. Lamentablemente, y como dije anteriormente, cuando existe un constante ejercicio de buscar un “culpable”,  y  solo una parte se dedica a conciliar, esta se desgasta, y se somete a un sufrimiento innecesario. Eso es lo que a la larga termina por destruir cualquier relación, por muy placentera que esta sea.


-          ¿Y qué piensa entonces de la gente que parece indiferente a las diversas experiencias que le ha tocado vivir a lo largo de la vida, y prosiguen como si nada, en nuevas aventuras?

-          Pues, es claro que hay gente que al término de una relación, tratara de buscar rápidamente la forma de involucrarse en otra. Ya sea al final de, o en el epilogo de la anterior.  Hay mucha gente que funciona en base a “cosechar” posibles candidatos para un eventual quiebre.  Esa conducta es fácil y simplista, pero a la larga someterá a nuestro Tarzán emocional, a un callejón sin salida, en donde tarde o temprano tendrá que enfrentarse al dolor que ha pospuesto por tanto tiempo.

viernes, 16 de enero de 2015

La ley del Hielo

"No te hablo, No me hablas,
y solo el silencio nos observa,
Como dos desconocidos,
Nos miramos el uno al otro,
y sabemos que llegará el día,
en que no hablaremos más".

 



La Universidad de Baylor, en Texas, llego a la conclusion que la ley del hielo, puede herir aún mas que una discusión real:
"Según afirma el estudio, por lo general en una relación existe una persona que se retira y otra que hace las demandas. Cuanto más uno exige y se queja, más la otra parte se retira, y así sucesivamente, señala el estudio. Este comportamiento repetitivo, finalmente termina por quebrar la relación y de una manera mucho más definitiva que una discusión, donde al menos, ambas partes explican lo que les está molestando. 

Por ello las personas necesitan ser conscientes de lo que está ocurriendo y de encontrar una alternativa o un enfoque más constructivo y educado para resolver los conflictos."


El silencio, llega cuando las palabras no surten efecto en la cabeza de la otra persona. Es sin duda un ejercicio erroneo, pero, cuando quedas relegado a ser siempre como el que "crea los problemas" - en una absurda idea de que los problemas de la pareja surgen de solo un extremo- , y tienes que ser quien quiebre siempre estas "treguas" de silencio, terminas dandote cuenta que por mucho que intentes manejar la comprension, todo será una prorroga hasta el proximo silencio.

¿Como llega una pareja a elegir el silencio como una opción para sus problemas?

Pienso que si bien, no es el mejor de los recursos para solucionar un problema, puede calmar las cosas. Creo que las palabras pueden herir más en el tiempo que un silencio. Quizá el silencio dé paso a la reconciliacion silenciosa... aunque también puede ser la manta que cubre la herida que seguirá sangrando en el tiempo. Yo solo tengo claro, que en una pareja no debiesen existir mas códigos que la comunicación. Hablar lo que te pasa, y no pensar tanto en lo que el otro estará pensando. La "duda mata". El interes por superar una discusión, siempre tiene que nacer de las dos partes. Cuando no es así, estamos frente a lo que probablemente será una relación victima-victimario, la que lamentablemente será sumamente tóxica para una de las partes.



jueves, 15 de enero de 2015

Odio

Odio: Sentimiento profundo e intenso de repulsa hacia alguien que provoca el deseo de producirle un daño o de que le ocurra alguna desgracia

No entiendo como un sentimiento tan grato como el enamoramiento, puede desencadenar con el tiempo, en un demonio tan funesto como el odio. ¿Como es posible que algo que nació como un sentimiento solemne y bienaventurado, concluya en un ritual que solo pretende la muerte, la destrucción y el daño del ser que alguna vez quisimos? ¿Qué misteriosos procesos encierra el universo, que dentro del más bello de los sentimientos, se esconda el abismo del vacio que tanto tememos?

Amar y odiar. Como dos caras de una moneda. No había un intermedio ni nada. No había otra opción. O eres mi aliado o mi enemigo.
Muchas veces me pregunté, cuan grande era el odio que una persona podría acumular sin comenzar a dañar a quienes le rodeaban. Cuanto tiempo tenia que pasar hasta que aquella "aparente indiferencia" del "tema superado", se resquebrajará y diera paso a la catastrofe que se ocultaba en nuestra psique. Si hay algo que he aprendido en el tiempo, es que los llamados "momentos que marcaron tu vida", pueden quedarse como una dolorosa herida abierta para siempre. Asi será mientras no podamos integrar la experiencia a lo que somos - y queremos ser- esta obrará como un fantasma que nos atormentará constantemente.

La vida consta de innumerables facetas, que en más de alguna ocasión, parecen patrones repetitivos.Sin embargo, cuando los patrones se repiten, es porque no hemos aprendido la lección, y el universo en su infinita sabiduría, nos esta dando una clara señal de aquello. Hay algo que tenemos que ver en nosotros mismos, y que estamos negando.

Inexplicablemente, todo lo positivo, guarda lo negativo en su interior. Todo placer en exceso, se convertirá inexorablemente en un infierno. Para que la oscuridad exista, tiene que haber una luz.

Tal vez, nunca voy a comprender que misterios existen en la mente de las personas. Cuales son realmente las intenciones que guardan esos saludos cariñosos, incluso esos besos y "te quieros". Cada sentimiento tiene la capacidad de sublimarse en algo totalmente contrario, cuando pretendemos volcar nuestros apegos en el otro. Cuando queremos "sacar provecho" de lo que los demas sienten por nosotros. Cuando queremos manipular el curso de las cosas, cuando pretendemos jugar a ser Dios. Es ahí cuando el crisol del universo nos enseña que tal vez no hemos sentido mas que enamoramiento. Tal vez no nos hemos acercado ni de cerca al amor.

Y es que cuando nos acercamos realmente al amor, en toda su extensión, no solamente en el ambito de pareja, alcanzamos sin querer, una comprensión total de la sabiduría del universo. Creo que el verdadero amor, se alcanza primero, desde nosotros mismos, y nuestra aceptación de lo que somos.

miércoles, 14 de enero de 2015

Después de todo, mañana será otro día

"Después de todo, mañana será otro día", era la frase que rezaba una Scarlett O'Hara, al final de la pelicula "Lo que el Viento se llevo". Al atardecer y luego de ser victima de engaños y decepciones, se entrego al mañana como un balsamo mágico para los dolores de su maltrecho corazón, que fue machacado durante la mayoría del metraje de la cinta. No voy a escribir una reseña sobre el enredado culebrón que ocurría en medio de la guerra civil americana, y que terminaba con amores de ensueño, mentiras, engaños y todo lo que una buena teleserie pudiera contener. Creo que me voy a detener en la profundidad de la frase que utilizaba la protagonista de la pelicula.

Pensar en que el mañana tiene la respuesta para todos nuestros problemas, sin aprender la lección del presente, es algo a lo que estamos mal acostumbrados (¿O quizas bien acostumbrados?) y que se vuelve una forma de ignorar nuestros problemas. Problemas que quedan sin un acuerdo, o que solo logran un acuerdo beneficioso para una de las partes, el odio, el resentimiento, la tristeza. Muchas emociones quedan sin comprender mientras, nos entregamos a la magia del mañana sin más, pensando que el tiempo será suficiente para hacernos olvidar, sin integrar ninguno de los sentimientos que pasan por nosotros.

El no vivir el presente, y entregarse a las bondades medicinales del mañana, como si de alguna forma, todo se arreglará mágicamente al olvidar o ignorar los hechos de la vida, se ha convertido en la practica preferida de todos durante los albores del siglo XXI. ¿Acaso la gente cree que puede simplemente dejar pasar los sentimientos sin más, y sin pensar que de alguna forma, estos se expresarán en nosotros, ya sea a través de enfermedades o neurosis?

Vivimos en un siglo en donde los nuevos sacerdotes se encuentran en las redes sociales, lugares en donde solemos confesarnos, y más que buscar una penitencia por nuestros errores, muchas veces buscamos compasion y aprobación. Ni siquiera hacemos el ejercicio de leer. Todo debe ser rápido, compacto, simple. Si hay dolor, que no se note. Si hay alegría que se note muchisimo. Vivimos para aparentar, para demostrar algo que no somos o que no sentimos. Llenos de deseos de algo más, pero muy poco conscientes del momento.

No se que habrá pensado Vivian Leigh, al enunciar aquella frase de "Después de todo, mañana será otro día", pero siento que de alguna forma, se  transforma en el equivalente al "no lo hago hoy, lo hago mañana" o el "hoy no se fia mañana si". Un engaño para nosotros mismos que no nos atrevemos a dar el paso para cambiar el mañana hoy. Si, ahora mismo en este minuto.


martes, 13 de enero de 2015

No me sirves

No me sirves...

Resonaban esas palabras una y otra vez en mi cabeza. Trataba de repetirlas para que perdieran el sentido. Pero no funcionaba. Seguían ahí, taladrando hasta lo más profundo de la mente, tratando de descifrar el significado que se encontraba en aquellas 3 palabras.

Si tenia alguna duda respecto a la veracidad de los sentimientos de ese alguien, ese mantra me lo demostró. Cada vez que me comparaban con una historia anterior, o cada vez que decidía inutilmente realizar el ejercicio de modificar mi conducta en pro de mantener las cosas como estaban, más salía a resurgir en la superficie, el lodo que ocultaba la otra persona. 
No me sirves, era la respuesta que fulguraba con odio tu boca...

Yo solamente me convertí en un objeto, un proveedor, nunca en la persona que quería ser contigo. Mi destino era vivir petrificado, junto a mis sueños, a la eterna espera que alguna vez, te dieras cuenta de lo que realmente sentía, y el significado que torpemente, le diste a mi vida.


Pero hoy agradezco esas palabras. Agradezco que me hayas hecho despertar y te hayas hecho despertar de ese sueño. Me di cuenta que el único dueño de mi vida y mis sueños soy yo mismo. No puedo seguir luchando por cumplir los sueños de los demas, ni tampoco sublimarme en lo que los demas estan sintiendo, si yo mismo estoy mal. Si yo mismo me estoy negando ser.

No puedo negarme a ser yo mismo, solo tengo esta vida, y ya me di cuenta que las cosas que han estado conmigo, siguen ahi siempre, inmutables, y lo que ha tenido que pasar, simplemente paso. 

Yo no te servía, es verdad, pero tu me serviste de mucho.