De pronto, aquel idilio, se ve interrumpido por un suceso inexplicable, pero totalmente esperable en nuestra naturaleza. Cada uno refugiado en un inexplicable estado, en donde las palabras y la comunicación carecen totalmente de sentido. Es una situación incomoda y carente de toda logica, que con el paso del tiempo, se va transformando en un cumulo de sensaciones que pueden variar desde el odio más potente, hasta el sufrimiento más profundo.
¿Te has sentido preso de un estado de soberbia?
¿Aquel sentimiento de superioridad frente a los demás que provoca un trato distante o despreciativo hacia ellos?
¿O eres de los que toma la soberbia como un falso sentido del orgullo, o algo que a final de cuentas te completa como ser humano?
¿O piensas al igual que Nietzche, que es un valor más en la cadena de valores del hombre?
Es complejo hablar de este concepto en particular. Su percepcion debe variar en cada persona y sin duda para algunos debe ser uno de los puntos principales para permanecer inmutables a las diferentes situaciones que enfrentan durante el transcurso de la vida.
Por ejemplo, en medio de una discusión, el punto central que generó el conflicto, queda relegado a un segundo lugar, cuando dos "soberbias" se reconocen. Cuando existen dos puntos que quieren permanecer integros y demostrar quien es mas poderoso. La soberbia no transa ni es capaz de reconocer un error. Insiste constantemente en el ejercicio de doblegar a quien se le ponga enfrente, incluyendo al propio ser que le permite su existencia. No hay limites. Hay que arder tratando de demostrar que la razon del ser debe imponerse por sobre el momento, sobre el otro y ganar una victoria que no lleva a ningun lado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario